
Una vez mas nos separamos para tratar de entendernos, una vez mas en este mundo terrible estamos tan cerca y tan lejos todos unos de otros.
Porque estamos enfermos y fundiremos todo al plástico, creando al rededor solo un retrato de esa enfermedad que nos consume. No hay sentido si en el centro de todos nuestros esfuerzos no hay balance y si nuestros logros no nos permiten entender. Tal vez no nos extingamos pero pronto seremos solo unos pedazos de carne andante y muerta, esperando que la música nos devuelva lo que perdimos el incendio de nuestras almas quemándose en ese infierno sintético que nos ha costado tanto crear.
Ya no vemos nuestra conexión con el mundo y pretendemos desligarnos, olvidarnos, que somos seres de la naturaleza.